La vida de Tony Sirico es profundamente controversial e interesante. Y es que el actor que hoy en día conocemos sobre todo por su papel en Los Soprano recorrió diversas profesiones antes de ser quien es hoy en día. Incluso fue un criminal que estuvo bajo arresto en varias ocasiones.
El nombre completo de Tony Sirico es Gennaro Anthony Sirico Jr. Él nació en Nueva York en 1942 y creció en Bensonhurst, en el barrio de Brooklyn, que es conocido por albergar a muchas personas de Italia y, sobre todo, por incluir entre su población a reconocidos miembros de la mafia.
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En una entrevista para Los Angeles Times en 1990, Sirico dijo que para él, vivir en ese barrio era tener que probarse a sí mismo constantemente. “O tenías un tatuaje o una cicatriz por arma de fuego”, dijo el actor para luego agregar “Yo tengo las dos”.
Naturalmente, esta no es la hazaña más criminal del ahora actor. Más bien, Tony Sirico está íntimamente vinculado con el crimen porque fue ladrón y un personaje bastante respetado en el barrio. En total, fue arrestado 28 veces en su vida, siendo la primera vez un pequeño de tan solo siete años de edad por robar monedas de un puesto de diarios.
De ahí en adelante, sus entradas y salidas de prisión fueron constantes. También estuvo preso por robar en una discoteca de Nueva York. Y él mismo ha narrado que cada vez que lo revisaban ahí, él cargaba consigo mismo varias pistolas para poder defenderse en su barrio. Sirico declaró “En nuestro barrio si no cargabas con un arma era como si fueras el conejo durante la temporada de caza”. De acuerdo con sus propios testimonios, era un visitante tan constante de la cárcel que ya se podía jactar de conocer a todos los jueces de la ciudad.
Curiosamente, fue en este mismo lugar que conoció la actuación. En alguno de sus pasos por la cárcel en los años setenta, vio a una compañía de teatro conformada por exconvictos que presentaban obras a los reclusos. Ahí se dio cuenta de que la actuación era algo que él podía y quería hacer, ya que estaba acostumbrado a actuar con ligereza frente al público y no le intimidaba la reacción de la gente.
Se adentró en la actuación y lo hizo tan bien, que al poco tiempo ya estaba actuando en películas de Martin Scorsese, específicamente en Goodfellas, cinta que está repleta de lecciones de estilo que todos podríamos aplicar.

Eventualmente llegó a tener el papel que definió buena parte de su carrera: Paulie Walnuts en Los Soprano; un mafioso matón que es leal a su jefe Tony Soprano y que siempre está esperando el reconocimiento por su trabajo. Fue parte de la serie durante las seis temporadas y media que duró. Para construir a su personaje, Tony Sirico ha dicho que solo necesitaba recordar su pasado violento y turbulento para obtener los elementos necesarios para interpretar a un personaje de barrio rodeado de criminales.
Fuente: GQ